Hace unos días tuve un
accidente de tráfico. Yo era una de las conductoras implicadas en él. No iba
acompañada, suerte que al fin y al cabo, iba sola.
Fue un momento terrible, esos
minutos en los que estás dando vueltas por la carretera, dándote con coches
como si fuese la atracción de feria y no puedes parar. No puedes tomar el control del vehículo.
Ese instante es rápido,
no te da tiempo a pensar. Pasas mucho miedo y ves tu vida pasar por delante. Yo
creía que si algún día tenía un accidente, podría tomar el control. Pero no, no
fue así, no pude hacer nada.